Florencia Zuñiga por Wally Ferraro

ODA I

Su dulcecita voz  cual estruendo del mar suena ,
cuando del eros y tánatos habla.
Una ronda,
Una corona,
Una fogata
y en su templo el rito completa.
Como alguien  que con estas ofrendas
a los Dioses ayuda pidiera,
Ella a duelo se bate,
Empuñando grafito, 
su fiel amigo y compañero.
A veces tímida y
otras con desparpajo,
Arremete su trazo .
En busca del erotismo
bordeando los abismos de la muerte
 rozando los profundos sentidos de la vida.

Con Uds.

Florencia Zuñiga